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La romería de la Virgen de Luna, una fe y un rito a prueba de siglos

Julia García. Diario ABC
La devoción, la tradición popular y el interés histórico y etnológico van de la mano en una fiesta que sigue intacta de generación en generación en Pozoblanco y en Villanueva de Córdoba. La romería de la Virgen de Luna goza de un buen momento y la consecución de la declaración Bien de Interés Cultural, que está en proceso, protegerá aún más sus ritos y su esencia.

Juan José Cartan, presidente de la hermandad de la Virgen de Luna de Villanueva de Córdoba, repasa para ABC el origen de todo: «Tenemos que remontarnos al siglo XV y XVI desde que se tienen las primeras noticias de la devoción a la Virgen de Luna en estas tierras, y se ha mantenido todos estos años».
Asegura que en Villanueva de Córdoba «es la devoción más intensa que existe y la hermandad más numerosa que hay, somos 1.400 hermanos en un pueblo que no llega a 9.000 habitantes, el porcentaje de población que son hermanos y hermanas es elevadísimo».

La Virgen de Luna se encuentra en Pozoblanco desde el pasado fin de semana. Y, a finales de enero la Virgen de Luna salía en procesión por los alrededores del santuario de la Jara por el pueblo de Villanueva de Córdoba durante su última semana de estancia allí.
Es ésta una de las principales peculiaridades que rodean a la devoción, Las romerías, los lugares y las celebraciones que tienen alrededor cada año se rigen en virtud del calendario establecido.

Sus tres casas
Cartan explica que «la Virgen de Luna tiene tres casas y que eso ha sido objeto históricamente de varios pleitos y enfrentamientos entre las hermandades para ver quién tenía la primacía sobre la devoción, la imagen, el traerla y el llevarla, las fechas».

En el momento presente ocurre todo lo contrario: hay buena sintonía entre las corporaciones y reman juntas en la misma dirección cuando es preciso. En las romerías participan las juntas de gobierno y se invitan mutuamente.

La conmemoración del 75 aniversario de la imagen actual de la Virgen de Luna el año pasado, el trabajo para la declaración de Bien de Interés Cultural de la romería y la futura coronación canónica son pruebas palpables de esta coyuntura favorable.
Los tres hogares que acogen a la patrona de Pozoblanco y de Villanueva de Córdoba son la parroquia de Santa Catalina, de Pozoblanco; la parroquia de San Miguel de Villanueva; y la ermita, en el centro de la Dehesa de la Jara.

El domingo de la sexagésima (justo el pasado domingo) la Virgen regresa a Pozoblanco, que la lleva al santuario el Domingo de Pentecostés y el lunes de Pentecostés va a Villanueva, y permanece en este pueblo hasta el segundo domingo de octubre.

Otro día señalado es el 15 de agosto, cuando Villanueva celebra la solemnidad de la Ascensión, ya la Virgen de Luna baja de su trono en la parroquia de San Miguel para ser expuesta en besamanos.
El Bien de Interés Cultural, que ya engloba a las romerías del Rocío y de Valme, en Dos Hermanas, supondrá reconocer en el futuro esta romería del Valle de los Pedroches por su valor etnológico, y también salvaguardarla. Así, es un antropólogo el que ha estudiado en primera persona y documentado a fondo con los testimonios de los cofrades y devotos estas vivencias.

El 3 de febrero pasado la Comisión provincial de Patrimonio de la Junta de Andalucía aprobó la apertura del expediente de inscripción en el Catálogo General de Patrimonio Histórico Andaluz. ¿Qué es lo más llamativo para la Junta? Que las romerías trascienden los límites de los municipios para ser «supracomunales en la comarca de Los Pedroches», y se organizan en «un modelo de ritual festivo basado en el patronazgo compartido de la imagen sagrada y la movilidad del símbolo de su santuario a las localidades que le tienen devoción».

Su valor territorial y simbólico sirve para articular «un conjunto de rituales y de fiestas organizadas en su honor, al margen de las romerías». El plano social también se subraya, de las cofradías militares como colectivo articulador de estos rituales.

Si lo consigue, la de Luna será la primera romería de la provincia Córdoba como BIC, algo que sí tiene por ejemplo el Prendimiento, en Priego de Córdoba.

Juan García, capitán de la hermandad de la Virgen de Luna de Pozoblanco, indicó que la romería es crucial para sus habitantes: «Se celebra mucho el que la Virgen de Luna vaya a Pozoblanco. Se demuestra con más de 20.000 personas en el santuario y muchísima gente haciendo el camino andando y el de regreso. Hace cuatro o cinco años iban 16 carrozas, este año han sido 95». Obliga a establecer dispositivos con el Ayuntamiento y los cuerpos de seguridad muy ajustados y «no ha habido ninguna incidencia».
Esta corporación tiene un centenar de integrantes (acaban de ingresar dos mujeres por vez primera en su historia) y sigue conservando la estructura militar y su atuendo, que es muy característico. También fue así hasta principios del siglo XX en la de Villanueva de Córdoba. Recuerda Juan José Cartan que en 1911 dejó de utilizarse ese tipo de indumentaria y se decidió abandonar el uso de armas. Y, progresivamente, fue abriéndose al ingreso del público en general.

En 1980 se le dio un impulso muy grande a la hermandad de Luna de Villanueva y de 400 hermanos creció a los 1.200, y en 2023 no cesaron las incorporaciones. En este caso las primeras mujeres entraron en 2008.

¿Y cómo viven los jóvenes esta devoción en pleno siglo XXI, se perpetúa la traición de padres a hijos? Cartan no duda: «Aquí es muy tradicional que el niño nazca y, nada más recibir el bautismo, lo primero tras eso es hacerse hermano o hermana de la Virgen de Luna, y todos los años cuando tenemos la imposición de medallas tenemos muchos niños chiquititos».

Los números
Otra prueba de la amplitud del fervor por la Virgen de Luna en Villanueva es que la cofradía cuenta con filiales en Madrid y Cataluña. En cuanto a las cifras de asistencia a las romerías en Villanueva explica que últimamente la del segundo domingo de octubre ronda los 15.000 participantes, y pueden acudir devotos de otros pueblos, depende de muchos factores. La de

Pentecostés es más festiva, pero a veces resulta más íntima entre comillas porque cae en lunes. Más allá de las cifras, son siempre citas impregnadas de emociones y multitudes.

Juan García entró como cofrade en 1973 en Pozoblanco, en 1978 comenzó a formar parte de la junta directiva y lleva 31 años de capitán. Los nuevos estatutos les marcan otras directrices: ese puesto antes era vitalicio, pero ya está sujeto a mandatos limitados. «Mi idea es que vaya entrando savia nueva y siga continuando la tradición mejorándola», adelanta.

La forma de vivir la romería sigue igual, según su experiencia, «del mismo modo que nuestros antepasados lo hacían», con fluctuaciones en la cantidad de asistentes.

Pozoblanco, que cuenta con cofradía de la Virgen de Luna desde el siglo XV, se lleva a su patrona el domingo de sexagésima y siempre son 105 días los que permanece con ellos. La devuelve el Domingo de Pentecostés. El lunes de Pentecostés va a Villanueva de Córdoba y los devotos de Villanueva la dejan el segundo domingo de octubre.

Entre los ritos que menciona Juan García figura la despedida del carro, que es el simulacro de lo que se hacía en otras épocas de llevar comida al santuario. Mantienen también la llamada de los cofrades casa por casa, labor que desarrollan el sargento, el ordenanza y el tamborilero de madrugada.
Esta corporación tiene un centenar de integrantes (acaban de ingresar dos mujeres por vez primera en su historia) y sigue conservando la estructura militar y su atuendo, que es muy característico. También fue así hasta principios del siglo XX en la de Villanueva de Córdoba. Recuerda Juan José Cartan que en 1911 dejó de utilizarse ese tipo de indumentaria y se decidió abandonar el uso de armas. Y, progresivamente, fue abriéndose al ingreso del público en general.

En 1980 se le dio un impulso muy grande a la hermandad de Luna de Villanueva y de 400 hermanos creció a los 1.200, y en 2023 no cesaron las incorporaciones. En este caso las primeras mujeres entraron en 2008.

¿Y cómo viven los jóvenes esta devoción en pleno siglo XXI, se perpetúa la traición de padres a hijos? Cartan no duda: «Aquí es muy tradicional que el niño nazca y, nada más recibir el bautismo, lo primero tras eso es hacerse hermano o hermana de la Virgen de Luna, y todos los años cuando tenemos la imposición de medallas tenemos muchos niños chiquititos».

Los números
Otra prueba de la amplitud del fervor por la Virgen de Luna en Villanueva es que la cofradía cuenta con filiales en Madrid y Cataluña. En cuanto a las cifras de asistencia a las romerías en Villanueva explica que últimamente la del segundo domingo de octubre ronda los 15.000 participantes, y pueden acudir devotos de otros pueblos, depende de muchos factores. La de

Pentecostés es más festiva, pero a veces resulta más íntima entre comillas porque cae en lunes. Más allá de las cifras, son siempre citas impregnadas de emociones y multitudes.

Juan García entró como cofrade en 1973 en Pozoblanco, en 1978 comenzó a formar parte de la junta directiva y lleva 31 años de capitán. Los nuevos estatutos les marcan otras directrices: ese puesto antes era vitalicio, pero ya está sujeto a mandatos limitados. «Mi idea es que vaya entrando savia nueva y siga continuando la tradición mejorándola», adelanta.

La forma de vivir la romería sigue igual, según su experiencia, «del mismo modo que nuestros antepasados lo hacían», con fluctuaciones en la cantidad de asistentes.

Pozoblanco, que cuenta con cofradía de la Virgen de Luna desde el siglo XV, se lleva a su patrona el domingo de sexagésima y siempre son 105 días los que permanece con ellos. La devuelve el Domingo de Pentecostés. El lunes de Pentecostés va a Villanueva de Córdoba y los devotos de Villanueva la dejan el segundo domingo de octubre.

Entre los ritos que menciona Juan García figura la despedida del carro, que es el simulacro de lo que se hacía en otras épocas de llevar comida al santuario. Mantienen también la llamada de los cofrades casa por casa, labor que desarrollan el sargento, el ordenanza y el tamborilero de madrugada.
Este año el Ayuntamiento de Pozoblanco ha comprado 500 tambores para los niños y repartido 750 hornazos a escolares participantes en un trabajo. Las personas mayores, que no pueden vivir la romería como antes, son trasladados en autobús a una misa en el santuario para que vivan también la fiesta.

Otro sueño forjado hace tiempo se concretará en el horizonte de 2025 con las dos localidades unidas: la coronación canónica de la imagen. Lo próximo va a ser la constitución de la comisión gestora que llevará el control de la organización del programa de actos.
El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, acogió favorablemente, en octubre de 2023, la petición conjunta de las hermandades de la Virgen de Luna de Villanueva de Córdoba y de Pozoblanco para la coronación canónica de la imagen en el santuario. Ambas cofradías acaban de lanzar la campaña de recogida de donativos común para llevar a cabo el proceso. Han creado una única cuenta bancaria conjunta, y también pueden realizarse las aportaciones mediante Bizum al código 08924.
Las coronaciones, que se producen siempre para reconocer a imágenes que gozan de una arraigada devoción entre sus fieles, llevan aparejados numerosos actos de culto, formación y caridad. En este punto, en que la Virgen de Luna permanece en Pozoblanco un periodo de tiempo largo, ambas hermandades van a comenzar a perfilar la cita. En el horizonte los devotos de la Virgen de Luna tienen ya el otoño de 2025 y es muy probable que la fecha escogida sea en el mes de octubre.

Miles de personas disfrutan de la romería del cambio de la Virgen de Luna en Pozoblanco

Julia López. Diario Córdoba
La de 2024 no fue una Romería de la Virgen de Luna más para la cofradía de Pozoblanco, ni siquiera para la localidad. Entre la fila de hermanos ataviados con la levita negra y con la escopeta en mano este domingo se pudo a ver a dos mujeres, la dos primeras que se suman a mantener cada una de las tradiciones que la cofradía guarda y pone en valor año tras año. Sin quererlo, suyo fue parte del protagonismo, compartido eso sí, pero su jurada de bandera no es algo más, es parte de la historia de la cofradía de la patrona pozoalbense. Victoria García López e Inmaculada García Pérez no pudieron contener la emoción en un día en el que también juró bandera Pedro García Sánchez. Savia nueva, jóvenes, algo que la cofradía necesita y agradece.

El día amaneció espléndido y eso se notó desde primera hora con centenares de romeros haciendo el camino de ida en busca de la patrona. Con el amanecer también llegaron los primeros disparos y el olor a pólvora, seña de identidad de la cofradía pozoalbense, hizo acto de presencia con ellos. La llegada de los hermanos al santuario marcó el principio de todo, fundamentalmente, del encuentro con la patrona. El abanderado desplegó la bandera, a hombros salió la Virgen de su santuario para presidir la eucaristía y en el colectivo la idea de una coronación canónica que llegará el año que viene. A ese hito hay que sumar los pasos dados para que la romería, junto a la de Villanueva de Córdoba, sea declarada Bien de Interés Cultural (BIC). Todo alegrías en un año relevante para la historia de la cofradía.
A los tres nuevos hermanos se sumó el reconocimiento a Francisco Cardador, que recibió la medalla de oro de la cofradía, mientras que Antonio Amor Gómez, Miguel González y Manuel Javier Cebrián lucen la de plata. También hubo despedidas en las jubilaciones de Francisco Coleto y Bartolomé Herrero, y es que la cofradía es como la vida misma.
Tras la eucaristía, Victoria e Inmaculada recibieron felicitaciones a las que respondieron con emoción contenida. Sus miradas dejaban ver ese cúmulo de sensaciones vividas en un día en el que «se cumplía un sueño que teníamos desde pequeñas». Ambas lo vivieron con sus familiares, algunos también hermanos de la cofradía, y siendo conscientes de que su entrada como hermanas será siempre histórica.
El capitán de la cofradía, Juan García, tampoco dejó pasar la ocasión para mostrarse satisfecho por la entrada de mujeres, pero también por la juventud que aportan los tres nuevos hermanos. «Solo hemos tenido comentarios positivos y para nosotros es importante también que entre gente joven que vaya dando el relevo a la gente que llevamos más años», comentó instantes antes de comenzar la comida de hermandad.

Después de esos momentos de convivencia, tocó emprender el camino de vuelta, con mucha calor y con mucha gente que arropó a la Virgen de Luna durante todo el camino. Se unieron a las que esperaron en el Arroyo Hondo la llegada de la patrona, lo hicieron, muchos de ellos, con hornazo en mano. Los más pequeños se lo ofrecieron, como marca la tradición, a la Virgen de Luna, a la patrona, que ya está en Pozoblanco un año más.

La Virgen de Luna vuelve a Pozoblanco tras una romería histórica

Rosa G. Aperador. El día de Córdoba
La Virgen de Luna ha llegado a Pozoblanco en la tarde de este domingo 4 de febrero, tras un intenso día de romería en el que miles de romeros se han reunido en torno a la patrona para celebrar su llegada. Las temperaturas primaverales y el cielo despejado han sido claves para que esta fiesta se haya celebrado en el Santuario de La Jara con alegría, y que el camino de regreso a Pozoblanco, siguiendo los pasos de la virgen, haya sido una de las opciones más elegidas para los romeros.

La Romería de Traída de este año ha sido especialmente celebrada por cuantas novedades se han dado en torno a esta cita, siendo la más destacada la jura de bandera de las dos primeras mujeres que se incorporan como hermanas cofrades de pleno derecho en la Cofradía de Nuestra Señora de Luna de Pozoblanco, que con carácter militar, siempre ha estado formada por hombres. Victoria García e Inma García, junto a Pedro García, han escrito una nueva página en la larga historia de esta cofradía, un hecho que “hemos recibido con mucha alegría, porque coincide que son chicas jóvenes y es savia nueva para la cofradía y para mantener la idiosincrasia y tradición, para que siempre haya gente que la secunde. Además, ha generado muchos comentarios tanto dentro como fuera de la cofradía, pero todos en sentido positivo, porque las mujeres se han incorporado a la hermandad como en otros colectivos, donde su participación y vinculación está presente”, ha declarado al término de la eucaristía el capitán de la cofradía, Juan García. “Uno de los momentos más especiales de hoy es la alegría de recibir a tres nuevos cofrades, que además por su juventud vienen a sumarse a la lista de hermanos al servicio de nuestra Señora”, destacaba el capitán en su intervención.
Las protagonistas de este punto de inflexión para la historia de la cofradía han estado visiblemente emocionadas durante toda la jornada de romería, siendo el momento más destacado la jura de bandera. Para Victoria García, besar la bandera “ha sido cuando ya este sueño se ha hecho realidad”. Para Inma García lo más importante ha sido “el abrazo de mi padre, que también es cofrade y ha sido mi padrino, tras besar la bandera”, mientras que Pedro García ha destacado el “abrazo de los hermanos cofrades” como el momento más emotivo. Un día, el de la romería, en el que las nuevas cofrades han estado recibiendo numerosas felicitaciones de los romeros por abanderar esta entrada de la mujer a la Cofradía de Nuestra Señora de Luna de Pozoblanco.

La aprobación por parte de la Junta de Andalucía del expediente para declarar las romerías de la Virgen de Luna, celebradas tanto en Pozoblanco como en Villanueva de Córdoba, como Bien de Interés Cultural por su singularidad y para garantizar el mantenimiento de las mismas en el futuro, ha sido otro de los puntos destacados de esta jornada romera. Juan García ha trasladado el sentir de todos los hermanos como “una satisfacción y orgullo muy grandes porque se haya aceptado el expediente, aunque aún queda un proceso burocrático por delante, para ambas cofradías y localidades es una alegría, porque es un éxito más el que podemos conseguir”. El alcalde de Pozoblanco, Santiago Cabello, ha reconocido que se lleva meses trabajando en este asunto y que “esperamos que pronto sea una realidad, porque supone un hito histórico muy importante que viene a sumar y a demostrar que esta romería sigue estando muy viva y que cada año atrae a más personas”.
A esta posible declaración como BIC de las romerías se suma la Coronación de Nuestra Señora de Luna para el 2025, en una fecha aún por decidir, aunque todo indica que coincidirá con la estancia de la patrona en su santuario, entre los meses de octubre y febrero. Para celebrar como se merece este acto, desde ambas cofradías se ha iniciado una campaña de captación de donativos para todos los gastos que puedan derivarse de esta celebración. El capitán ha señalado que “es idea de las cofradías dejar constancia de todas aquellas personas, empresas e instituciones que participen”, como una señal de reconocimiento por su generosidad para engrandecer este día que será tan importante de Pozoblanco, Villanueva de Córdoba y también para Los Pedroches.

Fieles al ritual de siglos pasados, la Cofradía de la Virgen de Luna ha seguido todos los pasos y momentos claves que marca la tradición para este Domingo de Sexagésima, que marca en el calendario el día en el que Pozoblanco lleva a hombros desde el santuario de La Jara a su patrona hasta su pueblo, donde permanecerá por cuatro meses. La llamada a los cofrades en la madrugada del domingo al toque del tambor marcaba los primeros sonidos de esta fiesta en la que además del redoble del tambor y los disparos de las salvas, al bullir de los romeros en el camino y el de la bandera rozando el viendo mientras se ondea, se sumaban las canciones del Coro Romero Voces de la Sierra durante la celebración de la eucaristía en el santuario.

Durante la misa concelebrada, además de la jura de bandera de los tres nuevos cofrades, también se ha hecho entrega de la medalla de oro por los 50 años de servicio a Francisco Cardador Fernández; las medallas de plata por los 25 años a Antonio Amor Gómez, Miguel González Porcel, Manuel Javier Cebrián Dueñas; y los diplomas de jubilados a Francisco Coleto y Bartolomé Herrero.

A las tres de la tarde, como manda la tradición, la Virgen de Luna salía a hombros de una de las tres cuadrillas de porteadores que este año han sido los encargados de llevarla por el camino de la dehesa hasta Pozoblanco. Un momento muy emotivo en el que los portadores la alzan para despedirse de su santuario antes de emprender el camino, en el que ha estado acompañada por centenares de romeros. En mitad del camino, en la Cruz Venta Caída, los romeros han podido reponer fuerzas en la Despensa del Camino, donde el Ayuntamiento de Pozoblanco, a través de la Concejalía de Turismo, obsequia con un refrigerio, antes de emprender el último tramo del camino.
A la llegada al Arroyo Hondo, la entrada natural desde el santuario hasta Pozoblanco, las voces de los niños ofreciendo su hornazo con el cántico Virgen de Luna quieres mi hornazo, que si no me lo zampo ya podían escucharse, una cantinela que la acompaña también durante las calles de entrada. En el Arroyo Hondo, el capellán José María González le ha impuesto la Sagrada Imagen de los Sagrarios de Villanueva de Córdoba y Pozoblanco, tras ser recibida por las autoridades civiles y eclesiásticas, para su entrada en Pozoblanco acompañada por la Banda Sinfónica Municipal de Pozoblanco, y siguiendo el recorrido de costumbre, que en esta ocasión se ha engalanado con arcos luminosos para darle más luz durante su tránsito. La procesión de la Virgen de Luna continúa hasta el Ayuntamiento, donde es recibida por todos los concejales, mientras el alcalde de Pozoblanco le hace entrega del bastón de alcaldesa perpetua de la ciudad, para continuar con una descarga cruzada de honor.

Momento vistoso también es la ofrenda floral que el Club Hípico de Pozoblanco hace a la imagen de la Nuestra Señora de Luna, que en su procesión también ha estado seguida por las 90 carrozas romeras que han participado en la romería y que finalizan aquí su recorrido. Fuegos artificiales dan el broche final a la Romería de Traída de la Virgen de Luna, que el lunes saldrá de nuevo a la calle en procesión por las calles de Pozoblanco, tras la eucarística que se celebra en la Parroquia de Santa Catalina a las 11:00. Dos serán las nuevas paradas que la patrona realizará en su recorrido, en la residencia Hermanas Muñoz Cabrera, y el Colegio Concepcionista por la celebración de su 125 aniversario.

Novedades de la romería

La falta de agua potable también se ha dejado notar en la romería, dado que una de las cisternas que habitualmente está en Pozoblanco se ha trasladado hasta el santuario para ofrecer agua potable a los romeros que lo necesitasen. Una de las iniciativas puestas en marcha por la Concejalía de Festejos ha sido el reparto de pulseras identificativas para los menores y aquellos mayores que lo necesitasen, donde se podía escribir los datos de contactos de los familiares para poder comunicarse en el menor tiempo posible con ellos en caso de pérdida por distracción del grupo familiar.

La romería de la Virgen declina reúne a más de 35. 000 personas en Pozoblanco

ABC Córdoba
El santuario de la Virgen de Luna, en plena dehesa de Los Pedroches, ha vivido este domingo una intensa cita romera, que ha reunido, según las primeras estimaciones, a más de 35.000 personas en una de las jornadas más multitudinarias que se recuerdan.

El buen tiempo y las temperaturas primaverales han sido la tónica dominante en una romería que se ha desarrollado sin incidentes a pesar de la importante movilización de gente y de vehículos que registraron desde primera hora de la mañana.

La Virgen de Luna salió de su ermita camino de Pozoblanco algo después de las tres de la tarde para realizar el camino hasta la localidad, en la que la acompañaron no sólo los hermanos de esta histórica cofradía sino centenares de personas en una de las jornadas con más peregrinos vividas en los últimos años.

Uno de los momentos más emotivos del día se vivió durante la eucaristía, en la que juraron bandera los tres nuevos hermanos de la cofradía, dos de ellas mujeres por vez primera en la historia.
El alcalde de Pozoblanco, Santiago Cabello, antes de iniciar el camino de vuelta junto a la Virgen explicó que se estaba viviendo «una romería magnífica, sin incidentes hasta el momento y marcada por la enorme asistencia de público, que demuestra que esta devoción está muy viva y que la Virgen de Luna está cada vez en más corazones».

El regidor felicitó a los tres nuevos hermanos –Inmaculada García, Pedro García y Victoria García- y reconoció la labor que desarrolla la cofradía no solo en estos días sino a lo largo del año.
El alcalde, por último, también mostró su alegría porque la Virgen de Luna esté gozando cada vez de un mayor reconocimiento y proyección exterior, como demuestra el hecho de que esté ya muy avanzado el camino para que las romerías sean declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) o la decisión del Obispado de proceder el próximo año a su coronación canónica.

El capitán de la cofradía de la Virgen de Luna, Juan García, también coincidió en señalar que se trataba de una romería multitudinaria y marcada por el buen ambiente y la falta de incidentes.

El máximo responsable de la hermandad se ha refirió, igualmente, al proceso de declaración BIC de las romerías, que avanza según ha explicado tal como estaba previsto, y al proceso de coronación, que se realizará el próximo año uno de los fines de semana que la Virgen está en su santuario y que se espera que sea un acto multitudinario.

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